El coleccionismo generó numerosos adeptos que pasan sus días en busca de esas piezas que sirven para acrecentar su tesoro personal. Si bien aquel que se dedica a esto puede coleccionar cualquier tipo de cosas, uno de los objetos más elegidos dentro de la actividad son los juguetes. Incluso, hay quienes dan un paso más y no lo toman sólo como un hobby, sino que encuentran el modo de trabajar alrededor de lo que les gusta. “No lo veo como un trabajo... Cada vez que hago un muñeco estoy jugando con él, así que diría que simplemente me siento a jugar en mi matricería”, dijo Rafael Reartes, artesano de 76 años que fabrica juguetes desde hace más de cuatro décadas. “Creo que desde que salí de la panza de mi madre quería dedicarme a esto”, continuó uno de los matriceros más conocidos del país.
Reartes es de Buenos Aires, pero estuvo en Tucumán el último fin de semana, junto con su amigo y colega Ezequiel Fonsalido, para presentar su nueva línea de juguetes “Vintage Factory Custom”.
La idea del emprendimiento, según Reartes, es hacer un juguete económico para grandes y chicos, y especialmente para customizadores y fanáticos del art toys, figuras coleccionables creadas por diseñadores. “Este público no daña las figuras de colección originales para que perduren más años y sigan pasando de mano en mano a cada generación”, sostuvo.
De hecho, el nombre de la marca también tiene una explicación: “es Vintage porque es una figura referida a He Man, Factory porque es de fabricación propia y Custom porque está dirigido a un público en específico”.
Trabajo tradicional
La fabricación de juguetes es un trabajo, al menos para Reartes y Fonsalido, que requiere una gran dedicación y precisión para hacer un producto de calidad. En esta actividad es difícil aplicar herramientas nuevas como la elaboración a través de una impresora 3D. “La principal diferencia de hacerlo mediante la matricería es la posibilidad de hacer producción en cantidad y en mucho menor tiempo; cuando en una matricería quizás en una hora hacés 100 figuras, en una hora de impresión 3D hacés una sola parte de una figura. También está la diferencia en la calidad, los elementos usados para hacer juguetes de forma tradicional son de mucha mejor calidad”, explicó Fonsalido.
Es por esto que la producción de la nueva línea está principalmente a cargo de Reartes, matricero con muchos años de experiencia. Mientras, Fonsalido se encarga de cuestiones relacionadas a la distribución, ventas, publicidad, relación con el público, entre otras cosas. Fonsalido, incluso, está más vinculado con la colección de las figuras que con la producción. “Estoy en el medio del coleccionismo hace 25 años, tengo un canal de Youtube y siempre vi a Rafa como un maestro”, indicó Fonsalido en una entrevista telefónica con LA GACETA.
Conectados toda la vida
Para él, dedicarse a esta actividad desde tan temprana edad y no haberla abandonado con el paso del tiempo tiene un motivo: la relación con su papá. “Lo que me copó de esto es que cada figura que consigo me hace viajar a un momento en específico con mi papá, que desgraciadamente está enfermo desde hace 20 años”, precisó.
La diferencia de edad entre ambos es amplia: Reartes duplica en edad a su compañero. De todas formas -afirmó Fonsalido- la química entre ambos surgió desde que él era un niño, edad en la que empezó a admirar al matricero. “Yo jugaba con los muñecos de He Man que fabricaba Rafael en Top Toys y eso nos unió mucho. Él es parte de mi vida desde que soy chico y, en cierto modo, nos conocemos a través de los juguetes desde hace muchos años”, señaló el coleccionista, de 38 años.
Pese a esta conexión entre ambos, finalmente se conocieron el año pasado, cuando Fonsalido fue invitado a cubrir, para su canal de Youtube, el lanzamiento de una línea de figuras que sacó Reartes, y “pegaron onda” prácticamente al instante. “A parte de un cariño muy grande hay un respeto enorme. No lo conocía antes en persona, pero sí sabía quién era, lo que representa en mi vida, en mi infancia, pero no había tenido el gusto hasta hace un año de tener con él una relación de amistad y de compartir el trabajo”, aseguró Fonsalido. Y agregó: “Rafael es un tipo que ha vivido mucho, que sabe mucho y que la gente quiere mucho, porque hablar de He Man en Argentina es hablar de él. Para mi es un ícono del coleccionismo”.